Además de presentar el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus, Apple ha presentado el esperado iWatch, cuyo nombre oficial finalmente es el de Apple Watch.
Antes que nada, cabe recalcar que a diferencia del iPhone 6, del Apple Watch no conocíamos prácticamente nada, por lo que todo lo que acaba de ser presentado nos ha cogido por sorpresa.
El dispositivo está disponible en dos tamaños diferentes (38 y 42 milímetros de altura) y dividido en tres versiones, siendo cada una de ellas distinta según el uso que queramos darle.
La primera de ellas se llama Apple Watch, tendrá la pantalla de zafiro y una correa de acero inoxidable con cierre magnético.
El segundo modelo que nos encontramos es el Apple Watch Sport, el cual está destinado a la durabilidad incorporando un cristal más resistente.
Por último, nos encontramos con el Apple Watch Edition, el cual está bañado en oro de 18 dilates, por lo que es de suponer que será la versión más cara del dispositivo.
En cuanto a su sistema operativo, Apple no ha limitado a incluir una versión reducida de iOS, sino que posee un sistema operativo propio y totalmente diferente.
El dispositivo posee una pantalla táctil sensible a la presión y una rueda en el lateral, desde la cual podremos realizar acciones como zoom o desplazarnos entre pantallas.
Además, el Apple Watch también cuenta con una versión de Siri, por lo que podremos preguntar o configurar lo que queramos al igual que lo hacemos desde nuestro iPhone.
Por lo demás, el dispositivo será compatible con Apple Pay, aunque necesitará estar conectado a un iPhone, el cual debe de ser como mínimo un iPhone 5.
Saldrá a la venta a principios de 2015 por un precio mínimo de 349€, por lo que personalmente tengo que admitir que me parece “barato” siendo Apple.